Buscaste una eternidad ese par de zapatos. Caminaste cuadras infinitas atestadas de gente pidiendo permiso para pasar y no te importó, seguiste caminando y los seguiste buscando.
Juntaste valor y te sumergiste en tardes de calor insoportable llenas de ruidos de colectivos y autos. Seguiste buscando.
Un día, habiendo dado la lucha casi por vencida, aparecieron. Caminabas como si nada, pensando en cualquier otra cosa, cuando brillaron ante tus ojos en una vidriera de una avenida de la ciudad. Los compraste sin reflexionar mucho, te entregaste al consumo DE UNA.
Y ahora están ahí en tu placard guardadas al lado de los zapatos viejos que nunca usás y las remeras que usás para dormir.
In-so-por-ta-ble
miércoles
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 personas ya largaron:
CUAC
jajajaj conozco muchas personas que padecen de esa enfermedad..y bue, es asi, sera q es fruto de esta sociedad? no me importa!! es mas lindo tener algo nuevo en el ropero que ponerse a analizar la sociedad...o no?
es el consumo por el solo hecho de consumir!!!
Yo siempre te digo caro: atras tuyo hay un monton de amigas que esperan con las manitos extendidas que les regales tus "locuras consumistas"(imaginate al perrito desesperado por salir a la calle para hacer sus necesidades primarias y el dueno no encuentra la llave o algo asi...).
Te quiero riqui ricon
Publicar un comentario