jueves

Percance

De repente la tarde cambió. Una mano que perdió equilibrio y el piso se llenó de gotitas de pintura.
Alguien dejó el esmalte rojo abierto y eso que creí nunca iba a pasarme, pasó. En un segundo, el rumbo de la situación viró hacia otro lado y yo ahí, preguntándome cómo, qué hacer.
No pude evitarlo. Me quedé en silencio mirando el piso, el mueble y el vidrio astillado desparramado por todo el baño.
De fondo una película de terror que no logré cambiar y me quedé pegada viendo, sonaba en un momento de plena tensión.
Algodón y quitaesmalte resolvieron la cuestión.

Aunque limpié todo y no quedó rastro, cada tanto el olor a acetona me transporta al momento en que estalló el frasco y voló la pintura roja. Igual que el perfume que me sonó tan conocido en el colectivo.

6 personas ya largaron:

MAÍTA dijo...

cosas que pasan. te imagino mirando el piso sin decir nada con los brazos cruzados.
muy tuyo cuando se te cae algo. jajajajjaja

(nos conocemos demasiado? nosotras?)

Sumer Lagash dijo...

que lindo el olor a acetona!!!

alegra insanamente el saber de que hay gente que se manda cagadas como uno! :S

Besos

La CuLPa eS DeL oTRo dijo...

el perfume del colectivo ¿no es olor a chivo???

Sumer Lagash dijo...

Del colectivo del sueño.. un par de post abajo

Anónimo dijo...

peor es que te pase eso en una mesa de madera, pasas quitaesmalte y se mancha todo :S

gala roselló dijo...

la muchacha de arriba tiene razon. un día me trataba de sacar el esmalte arriba de la mesa de madera y tire todo el quitaesmalte. ahora la mesa tiene una hermosa mancha blanca.
como siempre, espectacular. aplausos