miércoles

Digame, así nos reímos todos

Hay un pacto implícito, no es que nos reunimos todos afuera y lo arreglamos. Entrás, y te das cuenta, SE SABE. Claro que siempre hay un desubicado que rompe el silencio, y no falta el estudioso que lo calla a las puteadas. Los demás miran con interés, claro: cualquier cosa antes que mirar nuestro libro.
Todos lo sabemos, pero no hay ningún cartel que lo explicite: en la biblioteca no se hace ruido, se estudia y nada más.

1 personas ya largaron:

cantobar dijo...

es casi como el cuento de los monos que no saben porqué no se puede subir la escalera a buscar una banana, pero sólo saben que si lo hacen los mojan con agua.