Estudios recientes nos muestran que es cada vez más normal en los humanos denominar a un objeto queriendo nombrar a otro o confundir el nombre de una persona con otra (este caso es el más común). Estas situaciones se dan comunmente en encuentros cotidianos con amistades o familiares, y casi siempre son acompañados de una carcajada general y una burla colectiva hacia la persona que ha cometido el inocente error. He aquí algunos ejemplos anécdoticos verídicos para la comprobación de la teoría:
(Caminando) Ay pará nati, esperame que se me salió la noticia! (en este caso el sujeto confunde SANDALIA con NOTICIA)
(Antes de salir) Ay Mishu estás divina, Que lindo te queda ese fideito! (en este otro, un sujeto distinto confunde VESTIDO con FIDEITO)
¿Qué piensa Ud. que significan estos errores? ¿Traición del inconciente o simples errores?
sábado
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plena traición del inconciente.
Sufro ese tipo de atrofia generalmente frente a los kiosqueros.
Entre muchas barbaridades, la más notable fue un duplete ante don José cuando demandé "un metegol y una paso de lo teros".
genial lo que te pasó jácher!
Me descostillás con cada comentario, gracias por formar parte de este blog, GRACIAS!
esunonoriunorgulioperonosedescostiliequemedimpresióncomocadavesquevoiasacarmesangreyveolagujaperomehagolmachitoylescupoalanfermeraundaledalequemelarebancoydespuesalgohechotodofantasmitadelcagasoquemedanesasagujasdeldemonio.
queremos conocerlo jacher, queremos leerlo en algun otro lado, dejenos conocerlo por favor!
denos un rastro por lo menos, una pista que seguir,
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